PRIMERAS EXPERIENCIAS

CAPÍTULO 0008 - PRIMERAS EXPERIENCIAS

Sayuri Matsumoto/ Kasumi Kurosawa

PARTE 1

Sayuri es una chica promedio que hasta ahora nunca había tenido problemas con nadie, pero todo eso cambió cuando en su vida apareció Noburo su padrastro el cual empezó a quitarle el tiempo de calidad que pasaba con su madre.

Ahora si ella no estaba en la oficina, se encontraba en casa teniendo sexo con su nuevo esposo y eso provocó la ira de su hija que poco a poco quiso sentirse querida.

Tocándose ella misma ahora intentaba aplacar el deseo por Noburo, pensando que él era quien la tocaba ella movía sus caderas presionando su vagina contra cualquier cosa que tuviera a la mano.

Un lápiz, la esquina de su escritorio, pero lo que se volvió su objeto favorito fue su almohada sentándose sobre ella, se imaginaba que era su padrastro quien la hacía alcanzar un orgasmo, pero cuando esto no sirvió decidió que empezaría a llamar su atención.

Molestándolo cuando su madre no estaba, Sayuri era quien le escondía el control de la TV o su teléfono móvil, pero aún así con todos estos juegos Noburo poca atención le prestaba y solo le repetía las mismas palabras.

-Uno de estos días te voy a dar un par de nalgadas que ni ganas de molestar te van a quedar… me entendiste Sayuri-Chan.

Hasta que ella decidió dejar los juegos y le hizo a Noburo una broma que llegó a los extremos, tomando su teléfono móvil lo arrojó en un vaso con agua para luego correr hasta su habitación e irse a encerrar.

*****

Mientras que Noburo al ver esto se enojó tanto que fue detrás para golpearla y aunque para ella resultó una broma cuando él entró, la vio esperando algún movimiento de su parte.

-Ahora vas a ver lo que es bueno.

Riendo como si todo fuera un juego cuando Noburo la jalo de la mano y la acostó boca abajo en su regazo, al levantar su falda noto algo increíble.

No había mucha diferencia entre el culo de Sayuri y el de su madre, incluso después de notar que su hijastra llevaba la tanga favorita de su madre.

-Acaso esa es…

-Tal vez… y acaso no vas a castigarme… No-bu-ro-kun

Empezando a formarse su erección, la cual sintió Sayuri al mirar a los ojos de su padrastro y reír solo provocó que este quisiera nalguearla.

Dándole el primer golpe una pequeña corriente viajó de sus pies a la cabeza haciendo que se excitara.

Empezando a mojarse cuando Noburo vio esto, ella ya tenía sus nalgas marcadas y al rozar sus labios vaginales ella fue la que le pidió más castigo.

-Qué te parece…

-Por favor… un golpe más por favor…

-Sí es lo que quieres.

Estampando sus manos una última vez cuando la dejo, fue ella quién se arrodilló y al bajar la cremallera de Noburo sostuvo su pene.

-Sabes cómo hacerlo…

-He visto a mamá cómo te lo hace.

-Entonces hazlo.

Aplacando la erección Sayuri lo metió poco a poco y empezó a jugar, usando su lengua parecía que lamia una paleta, mientras Noburo disfrutaba de los juegos de ella, incluso luego apretó la punta de su pene con los labios, mientras que movía su cabeza violentamente de arriba abajo.

-Eso… si que sabes cómo hacerlo.

-¡Gra...ci...aas!

-Y ya va a ser hora…. Vamos a hacerlo.

Ayudándola a levantarse poco a poco ambos se empezaron a desvestirse y al ver esos pequeños senos se tomó su tiempo para saborear sus pezones, antes de llevarla hasta la cama y al abrir sus piernas noto que aún era virgen.

Con una pequeña mata de vello púbico al acercarse acarició sus labios vaginales y luego entro poco a poco.

En cuanto a Sayuri al sentir el pene de Noburo entrar por fin encontró la sensación que estaba buscando, aunque al principio tuvo un poco de dolor a los pocos minutos todo era placer.

-El grande y grueso pene de Noburo está estirando mi pequeña vagina…

Siendo acariciada su cuerpo se estremecía, pues mientras se besaban las manos de Noburo tocaban sus muslos y el pene de este se habría paso dentro de ella.

-Igual de apretada que tú madre… incluso está caliente y húmeda.

-Por favor… continúa…

Disfrutando de los movimientos de Noburo ella pedía cada vez más, incluso cuando alcanzó un orgasmo ahora no era un objeto era el pene de su padrastro.

-Mi vagina está siendo arruinada por tu pene…

-Descuida… a partir de ahora yo voy a hacerme responsable de tu vagina.

Llegando a cansarse la embistió antes de empezar a bajar su ritmo y aunque ella quería más Noburo no le negó que se subiera sobre él, pues ya había llegado a su límite.

Descansando ahora ella se movía como antes lo había hecho sobre su almohada, disfrutando de aquel pedazo de carne era su instinto quien no le permitía detenerse.

-Puedo sentir como golpea mi útero… Me estoy volviendo loca.

-Vamos mueve más tus caderas… tu madre se mueve más rápido.

Sintiendo que era una competencia al escuchar aquellas palabras de Noburo, ella empezó a moverse más rápido y a pesar de que estaba por alcanzar un orgasmo no se detuvo, solo deseaba demostrarle que ella también era buena.

-Me corro… mi vagina se está corriendo…

-Vamos solo un poco más

-Ya no puedo… pues cada vez que empujo siento que mi mente se pone en blanco.

Llegando a alcanzar un orgasmo Noburo fue el que explotó dentro de ella y está al sentir el semen caliente se dejó caer al alcanzar el orgasmo que tanto buscaba.

-¡Estás dentro de mi!... Tu semen está llenando mi pequeña vagina.

-Bien hecho… Sayuri-Chan… Eres Tan buena como tú madre.

PARTE 2

Los días han pasado y su relación con su esposa e hijastra a mejorado tanto que hoy fue a la escuela por Sayuri, pero esta no salió y si apareció Kasumi la cual se subió en el asiento del copiloto.

-Hola… Noburo-kun…

-Hola Kasumi-kun… ¿y Sayuri-Chan?

Mirando a aquella chica de lentes toda flacucha, está solo sonrió antes de empezar a confesarle todo lo que sabía de él y Sayuri, quedándose completamente helado por un momento pensó que todo se vendría abajo hasta que escuchó la propuesta de Kasumi.

-Usted cree poder hacerlo conmigo… Noburo-kun.

-Con que también te gusta jugar…

Subiendo las lunas de su automóvil, avanzó antes de poner su mano en el muslo de kasumi, la cual le regaló una gran sonrisa al sentir los dedos de Noburo tocar su vagina.

*****

Después de acariciarla durante todo el camino cuando guardo el automóvil dentro del garaje se bajó y caminó hasta el otro lado, solo para bajar su cremallera y ofrecerle su pene a Kasumi.

La cual de inmediato abrió la puerta de su lado y empezó a jugar con el pene del padrastro de su mejor amiga.

-Mira todo ese líquido preseminal, debes haber estado aguantando bastante tiempo.

Empezando a masturbarlo mientras miraba a Noburo el cual disfrutaba cuando sus miradas se encontraron ella veía en él al hombre con el cual tendría sexo salvaje.

-Me tomaré mi tiempo y lo haré lo mejor que pueda…

-Descuida…

Llevándoselo a la boca empezó solo con la punta, usando su lengua la movía en círculos hasta que decidió atragantarse, calzando toda su boca de una sola arremetida hizo desaparecer por completo el pene de Noburo.

-Esto es... Increíble. ¡Uhaaw!... Se siente genial.

-Demasiado bien... Te lo está metiendo hasta el fondo… puedo tocar tu campanilla.

Disfrutando del placer que ahora le proporcionaban en este momento, Noburo la ayudaba al sujetarla y solo al ver cómo ella intentaba respirar la soltaba, antes de volver a ahogarla con su pene, hasta que ella cedió y cayó al suelo.

Escupiendo los fluidos no esperaba que Noburo la tomara de la cintura y la cargará en peso para llevarla hasta el capote del auto y al pararla ahí metió sus manos por debajo de la falda y le bajó su ropa interior antes de tirar de esta hasta romperla.

-Kasumi-kun voy a ponerlo adentro.

-¡Adelante!...

Subiendo su falda de pronto sintió como el pene de Noburo entró como si nada a su vagina la cual empezaba a ser bombeada.

Dejando salir su instinto la penetraba cada vez más fuerte y los pliegues del interior de Kasumi estaban siendo tocados por el pene de Noburo, mientras ella gritaba.

Arqueando su cintura sus jugos escapaban y ella deseosa de sentirse bien desabrochó su blusa y dejó sus pequeñas tetas al descubierto las cuales se sacudían con fuerza con cada golpe que se escuchaba en el garaje cada vez que la pelvis de Noburo chocaba contra sus nalgas.

-Sorprendente... Puedes ser más brusco.

Derritiéndose por el placer que le brindaban a su vagina, Kasumi se acercaba cada vez más al orgasmo y al explotar, Noburo movía sus caderas con ritmo más lento al ver cómo ella se arqueó antes de volver a cogerla más duro.

¡Ahhh!... Se siente tan bien...  No puedo más para.

Y en vez de detenerse volvío a cogerla como lo había estado haciendo antes, Kasumi gritaba y apretaba sus pezones, hasta que no pudo más y su peso la venció.

-Lo estás haciendo muy brusco...

-Y yo voy a romperte Kasumi-kun

Pareciendo una muñeca cuando Noburo la sostuvo, la acostó sobre el capote y al separar sus piernas la volvió a embestir.

Sintiendo las manos de Noburo en su cintura, Kasumi cerró los ojos y una vez más volvió a elevar su voz, su cuerpo estaba temblando y Noburo seguía embistiendo sin piedad.

-Empuja más hacia dentro… Está… tan dura.

Pidiendo más su cuerpo reaccionó, haciendo que se derramaran sus jugos y aunque Noburo estaba manchando sus pantalones continuó bombeando la vagina de Kasumi.

Mientras sus pequeñas tetas rebotaban, Noburo las sostuvo y las puso en su boca, recibiendo un nuevo estímulo la vagina de Kasumi se contrajo y apretó una vez más el pene de Noburo.

Succionando los pezones de Kasumi estos se endurecian más y más, mientras su rostro estaba lleno de sudor, lágrimas y saliva la cual se mezclaba.

-¡Haaahh!... Noburo-kun esto es genial... Si sigues moviendo tus caderas de esta manera voy a volver a venirme pronto.

-Y yo estoy por correrme…

Empujando con fuerza su pene, este entraba y salía a la vez que los jugos vaginales se desbordaban.

Llegando esta vez a su último orgasmo Kasumi convulsionó por el placer intenso, abrazando a Noburo este se concentró en chupar sus pezones y detuvo sus embestidas.

-Me corro...

-Y yo estoy apunto de llenar tu interior.

-Dentro no por favor…

Obedeciendo su orden Noburo se apartó y Sayuri simplemente se deslizó por el capote del automóvil, hasta caer al suelo, pareciendo una simple muñeca de carne llena de placer.

En cuanto a Noburo dejó salir hasta la última gota de su semen, manchando los lentes y la boca de Sayuri.

-Te has venido sobre mí...

-Y eso fue magnífico Sayuri-Chan

*****

Después de haber terminado con la mejor amiga de su hija, la ayudó a levantarse y la llevó hasta su casa, para luego volver.

Y como siempre su esposa e hijastras lo esperaban con los brazos abiertos.